Marzo en Imágenes

Más que mil palabras.

La genia total y absoluta de Sol, desde Valencia, España, me envió el regalito que gané en el sorteo que hace un tiempito organizó Ayez. Qué puedo decir que no hayan dicho las fotos: ES HERMOSO, pintado a mano, único. Y, además, como si fuera poco, ligué unos aritos haciendo juego.
Así que, solo queda agradecer inmensamente a Sol y recomentarles una vez mas sus preciosas creaciones. Mil gracias, otra vez!!! Felicidad absoluta.

Visualización 100%

No soy una mina muy espiritual, es decir, me siento mas atea que creyente [aunque más de una vez me encuentro pidiendo POR DIOS, pero ese ese es otro tema]
De todos modos, sí creo que la buena y la mala energía existen {Hola Jose María Dominguez}, y que cambiando el marco de nuestro pensamiento podemos sentirnos mejor, y de esa forma atraer cosas positivas.
Asi que, las veces que me encuentro pensando/actuando de manera negativa, intento salirme y empezar a pensar en las cosas buenas. Lo crees creas, dicen. Por lo tanto, y como hace un año en esta fecha estabamos contando los días para irnos a Porto de  Galinhas, y dado que esta vez por cuestiones laborales no pudimos irnos de vacaciones, me focalizo y pienso que el año que viene vamos a estar sentados en estas playas divinas o en algun otro paraje que aún no conocemos. [De todos modos con volver a lo conocido, me alcanza]

A pedirle al Universo todo aquello que deseamos o necesitamos, material o no, y visualización 100%.

Adicción

Tengo un problema [entre tantos otros]: soy adicta a las telas, las cintas, las lanas. O sea. No paro, no puedo parar. Me compro telas todo el tiempo. Creo que hago cuadernos solo para tener una excusa decente para SEGUIR Y SEGUIR comprando telas non stop. Y cuando digo seguir y seguir, es porque cada vez que voy a una sedería, grande, chiquita, mas o menos, me gasto $400, mínimo. Ni hablar cuando entro a E-bay, pero ese es otro cantar. Mi marido [Hola, Lucho] me mira y no lo puede creer. Me dice que basta, que es la ultima vez en el mes que voy a comprar telas, y cintas, y lanas. Y yo le digo, claro, claro, pero la semana siguiente, de nuevo. 
Por lo visto, me ve tan feliz que cuando me ve llegar con mi sonrisa de oreja a oreja y llena de bolsas, no se enoja,  solo me dice que ES LA ULTIMA VEZ EN EL MES, y asi todo vuelve a empezar.
El tema es que mas allá de él, YO tengo que aprender a manejar mi adicción. No se, debo tener 400 metros de tela, sin exagerar, eh. Importada y nacional. 
Justamente por ésto, el otro día se me dió por acomodar los retazos, restos de tela de cuando hago cuadernos, o de almohadones y mantelitos, y cuando ví la cantidad que tenía se me ocurrió hacer una manta [que al final resultó en un acolchado] tipo patchwork, sin un patrón a seguir porque eran todas retazos literalmente. Es decir, tenía 2,5 mts x 2,5 mts de pedacitos de tela, y todavia me quedan!!!
Acá van algunas fotos de como empezó todo y casi terminó, porque todavía le estoy poniendo el Bies, a mano, asi que, me estoy volviendo loca, pero me encanta. Todo ésto, de CERO en 4 días.
Y como será que me encantó hacerla que la semana que viene arranco el curso de Patchwork, lo cual tiene, como todo, dos caras, una positiva: por fin voy a hacer cosas utiles, o cosas, a secas, con toda la tela que tengo, y una negativa: es una excusa perfecta para seguir comprando. O sea.

Cámara a cuestas

Desde que tengo cuatro  gatas, no puedo parar de sacarles fotos todo el tiempo, pero cuando digo todo es TODO EL TIEMPO. Permanentemente están brindandome espectáculos dignos de fotografiar. Eso, sumado a que tengo la reflex hace menos de un año con varios lentes (entre ellos el 50mm, que es lo más) y le saco foto a TODO lo que veo, estas cuatro gatitas se las ingenian para hacerme cargar la cámara de un lado al otro, por toda la casa. Acá les dejo una serie de fotos de cada una. Pobrecito el día que tengo un hijo. Me tengo miedo.